Hoy os hablaré de varias joyas de los juegos que pasaron sin gloria

Es inevitable con la gran oferta que tenemos hoy en día en cuanto a videojuegos se refiere, que muchos de ellos pasen desapercibidos o no obtengan el mérito que se merecen a pesar de ser auténticas joyas.

Demon’s souls

Pocos serán los que hoy en día no hayan oído hablar de la aclamada serie «souls». Estos juegos crearon un nuevo paradigma y encandilaron a cientos de miles de jugadores, convirtiéndose en una de las series más importantes de la actualidad.

Ni que decir tiene que la saga culminó con el dark souls 3, de sobra conocido, un juego impresionante en muchos aspectos y con una fama muy merecida. Sin embargo, la saga souls comenzó con el mucho menos conocido demon’s souls.

Este juego se lanzó en 2009 (2010 para europa) y apenas cosechó éxito. A pesar de ser la base sobre la que se asentaría el primer dark souls este juego no terminó de triunfar, sobre todo en occidente, hasta el punto de que en cierto momentos conseguir una copia era realmente difícil. Por supuesto las mecánicas y gráficos del juego no tienen ni punto de comparación con las entregas más actuales.

Demon’s souls nos presentaba un mundo tremendamente complejo y una dificultad que había desaparecido del mundo de los videojuegos a esas alturas. Todo esto mezclado con su innovador sistema de combate y mejora podían haber hecho de este título uno de los más aclamados de su generación.

King’s bounty

Pocos habrán jugado a este juego, ya que, a pesar de ser uno de los mejores juegos de su año (2008), paso sin pena ni gloria.

En este juego encarnamos a un buscador de tesoros al servicio del rey Mark el Sabio. Su sistema de juego es el de un open world en el que tendremos que buscarnos la vida para derrotar a las fuerzas de la oscuridad que amenazan con destruir nuestro querido reino.

Lo interesante de este juego, sin embargo, es su maravilloso sistema de combate, llevado a cabo por los ejércitos del héroe en un mapa táctico al estilo rol. Este sistema de combate es bastante simple, siendo las unidades el principal método de combate, pero no el único. El maná y la furia te permiten realizar hechizos o utilizar a los espíritus en tu beneficio, dependiendo sus efectos de la clase que hayas escogido al comenzar.

La variedad de unidades disponibles, donde encontrarlas, las esposas y tus hijos, y un montón de otras mecánicas que introduce este juego hace que resulte muy divertido de jugar sobre todo para los amantes de los juegos de lucha táctica. Una pena que no tuviera más éxito en su momento, aunque por suerte podremos disfrutar de su segunda entrega en el 2020. Esperemos que sea tan buena como su predecesora.

Endless legend

Son pocos los amantes de los videojuegos que no han jugado en algún momento a la extraordinaria saga «Civilization» y no es para menos. Endless legend recuerda mucho a esta saga en varias de sus características, optando, sin embargo, por unas mecánicas mucho más profundas y complicadas que las que podemos ver en cualquiera de los juegos de 2K.

Aún sigue sacando expansiones y dlcs, por lo que tampoco se puede decir que este juego haya sido olvidado. Aún así, es muy poca la fama que tiene el juego en comparación con la que se merecería.

La forma de construir las ciudades y sus distritos, mucho más compleja que en los civilizations y luego adaptada en el sexto con críticas por parte de los usuarios, da mucha profundidad al juego haciendo importante pensar cada mejora.

La personalización de los héroes y de las tropas de a pie son muy interesantes y necesarias durante el juego, aunque a diferencia de otros títulos del estilo solo podrás tener unos pocos ejércitos a la vez, más parecido a lo que sucede en algunos títulos de total war.

El sistema de combate se parece al del kings bounty, aunque con bastante menos profundiad, y si tengo algo malo que decir sobre el juego es la escasa cantidad de tropas distintas que cada facción tiene a su disposición para elevarse por encima de las demás.

Por últimos las facciones. Probablemente este sea el mayor punto fuerte de este juego y lo que lo hace tan especial, a pesar de que es precisamente aquí donde intentan sacarte el dinero a dlcs, ya que cada facción es completamente distinta de las demás. Cada una tiene un estilo de juego tan diferenciado y unas mecánicas tan únicas que sentirás que estás empezando un juego nuevo cada vez que pruebas una, aunque muchas mecánicas del mapa permanecen inalteradas.

A pesar de que este juego no tiene nada que envidiar a los grandes juegos de este género, ha quedado relegado a un segundo e inmerecido plano, lo cual es una pena, pues me encantaría ver que podrían lograr en una segunda parte.